Violó a una gallina hasta matarla y recibió 15 meses de prision.
Hoy, un nuevo hecho escandaliza al mundo, en el cual un sujeto de 18 años, identificado como Kevin Simiyi y proveniente de la localidad de Bungoma, en Kenya, fue arrestado tras violar a una gallina hasta matarla. El repudiable hecho fue alertado por el dueño del animal que murió por agotamiento a los minutos después de haber sido abusada sexualmente.
Con el propósito de obtener una sentencia más baja, el acusado explicó que decidió abusar de la gallina, luego de sentirse avergonzado de conocer chicas y entablar una conversación con ellas. Luego de admitir el hecho, Simiyi explicó que además del temor, su situación económica le representaba un severo impedimento.
“Siento miedo de acercarme a las mujeres por mi extremo nivel de pobreza. Siento que estar con una mujer es muy caro”.
Tras ser enjuiciado por el tribunal de Bungoma, el juez del caso lo sentenció a 15 meses de presidio efectivo en la prisión de la misma localidad, por el delito de “bestialidad”, luego de enterarse por las declaraciones de Judith Nasimiyu, quien era la propietaria de la gallina, que el animal murió por agotamiento un par de horas después de haber sido encontrado.
Me es difícil entender a quienes no sienten compasión por los animales, o a quienes son capaces de provocarle gratuitamente el dolor a un animal indefenso. Y es que aún cuando decenas de países han decidido legislar sobre el tema, hay un centenar más que se rehusa a aprobar estamentos que sancionen con penas efectivas el maltrato animal. ¿Crees que este tipo de acciones debiesen ser catalogadas como ‘delitos’?